Este desafío Montessori puede despertar la mente de su niño.
Una herramienta diseñada para fomentar la inteligencia y la motricidad fina en los más pequeños surge en el corazón de la filosofía educativa que busca fomentar la independencia y el aprendizaje autodidacta. Este enigma de formas y colores se presenta como un aliado perfecto para el desarrollo cognitivo, brindando una experiencia de aprendizaje sensorial y concreto. Cada pieza que se ajusta revela no solo un patrón o una imagen, sino también una lección sobre concentración, paciencia y resolución de problemas.
- Desarrollo de habilidades motoras finas: Los niños mejoran sus habilidades manuales y la coordinación ojo-mano al manipular piezas, que son habilidades importantes en la etapa preescolar.
- El desafío de completar el diseño fomenta el pensamiento lógico y el reconocimiento de patrones y secuencias, que son fundamentales para el razonamiento matemático.
- Material de alta calidad y seguro: hecho de materiales no tóxicos y bordes suavizados, permite una experiencia de aprendizaje segura y duradera.